En el Barrio Pesquero de Santander, se ha realizado la demolición de un conjunto de naves datadas de mediados del siglo pasado. Fueron concebidas como almacenes portuarios y habilitadas para actividades productivas posteriormente. Su último ocupante fue una empresa dedicada al alquiler de maquinaria de obra, entre otras actividades.
Se trataba de seis naves convencionales comunicadas entre sí, de diferente constitución, con estructura metálica, muros de fábrica de ladrillo, cerchas metálicas o de hormigón, correas de madera o de hormigón, diversos forjados, etc.